La represión de los Castro

Por Rafael Piña Pérez
Lunes, 30 de julio de 2012

 

Ni los velatorios pueden realizarse en paz en la Cuba de los Castro. En plenos funerales del disidente Oswaldo Payá, la policía detuvo a más de 40 personas incluyendo a Guillermo Fariñas quien ha simbolizado a los cientos de miles de mártires víctimas de la represión de la dinastía más larga de América Latina.

Como todo régimen extremista sea de derecha o izquierda que no admite la disidencia, la dinastía de los Castro lleva 53 años reprimiendo a la Nación cubana, manteniéndose por la fuerza, negando todas las libertades, conculcando las iniciativas y creatividades individuales, así como toda así como las organizaciones de base de la sociedad que no sean controladas por el gobierno y el partido único de la revolución. 

Cientos de miles de cubanos han sido víctimas de la represión del régimen comunista entre paredón, cárcel, torturas y exilio, como si fuera poco la miseria en la que vive el pueblo todo, pero eso si, con una nomenclatura dominante que no llega al 2% de la población que tiene todos los privilegios característico de toda autocracia que controla monopólicamente el poder del Estado, intimidando a los ciudadanos con el miedo y el terror. 

Es en el fondo el mismo guión de los gobiernos comunistas que existieron en la derrumbada URSS, en Europa Oriental, China y Vietnam, subsistiendo, pero próximos al derrumbe en Corea del Norte, Cuba y Bielorrusia. En Cuba se ha prolongado la agonía del pueblo cubano por la ayuda venezolana cuyo costo aún no se ha cuantificado para mantener un sistema político y económico que de todos modos va inevitablemente al derrumbe por represivo e ineficiente en la producción de bienes y servicios.

Ni los velatorios pueden realizarse en paz en la Cuba de los Castro. En plenos funerales del disidente Oswaldo Payá, la policía detuvo a más de 40 personas incluyendo a Guillermo Fariñas quien ha sido apresado varias veces, pasando por una huelga de hambre que casi lo lleva a la tumba, simbolizando a los cientos de miles de mártires víctimas de la represión de la dinastía más larga de América Latina, siendo solamente superada por la de los Kim que gobierna a Corea del Norte desde 1948, 10 años más que la cubana. 

Las mujeres de blanco han sido reprimidas en varias oportunidades y se mantienen resistiendo las embestidas del régimen. Como todos los gobiernos comunistas, la dinastía cubana en más de medio siglo ha tratado de justificar su ineficacia y represión acusando a sus adversarios de desestabilizadores e inspirados por el imperio yanqui. Le echan la culpa de la miseria al bloqueo norteamericano, cuando el bloqueo que ha generado las carencias en Cuba es el bloqueo del propio sistema comunista causante de la pobreza general con represión. La torpeza de los gringos de mantener el bloqueo económico lo vienen utilizando los Castro para aumentar la autoestima de los cubanos. Echar las culpas al imperio es la misma excusa que han utilizado estos regímenes en procura justificar su ineficacia para resolver los problemas de la sociedad en la producción y distribución de los bienes y servicios.

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