Ciudad de la Habana, Cuba, (Agencias)- La disidencia cubana consideró hoy “excesiva” la petición de la Fiscalía de siete años de cárcel por homicidio imprudente para el español Ángel Carromero, que conducía el vehículo que sufrió el accidente en el que murieron los opositores Oswaldo Payá y Harold Cepero, informa Efe.
Elizardo Sánchez, portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), dijo a esta agencia que la decisión de la fiscalía cubana le parece “una petición fiscal excesiva”, ya que “si bien el marco sancionador es de 1 a 10 años”, en su opinión Carromero “fue víctima del mal estado de las carreteras en Cuba y de la falta de seguridad vial que reina en nuestro país”.
El líder opositor cuestionó además a las autoridades por la inesperada celeridad de la causa.
“Estas peticiones fiscales se demoran generalmente más de un año y el juicio seguramente será a puertas cerradas por razones del interés político del Estado”, denunció Sánchez.
Según el reporte, fuentes cercanas al caso estiman que Carromero podría ser juzgado a finales de este mes o principios de septiembre en la ciudad oriental de Bayamo (a unos 750 kilómetros al este de La Habana), próxima al lugar del siniestro.
El español se encuentra actualmente detenido en “100 y Aldabó”, un centro del Ministerio del Interior cubano en La Habana.
Por su parte, Berta Soler, portavoz del colectivo Damas de Blanco, dijo a Efe que hasta que las autoridades “no aclaren cómo ha sido el accidente no tienen que hacerle un juicio ni pedir siete años” de cárcel al joven español.
Soler, añade la agencia, apuntó que en la causa “hay muchas lagunas y muy pocas cosas claras” y reclamó que el juicio se realice en La Habana porque es donde se encuentra la familia de Payá, que ha intentado infructuosamente ver al procesado, reveló.
“Quieren que sea sencillo para poder salir ya de todo y limpiarse las manos”, agregó.
Carromero conducía el auto en el que el pasado 22 de julio el líder del opositor Movimiento Cristiano Liberación, Oswaldo Payá, y el activista Harold Cepero, murieron cuando el vehículo se estrelló contra un árbol.
En el automóvil, de alquiler, también viajaba el ciudadano sueco Jens Aron Modig, líder de las Liga Juvenil Democristiana (KDA) de su país.
Según la versión oficial cubana, las causas del accidente fueron el exceso de velocidad y otros errores del conductor al circular por un tramo de la carretera en obras y sin pavimentar pero señalizado al efecto.
Modig, que al igual que Carromero sufrió heridas leves, fue autorizado a salir de Cuba el día 30 de julio, después de comparecer ante la prensa en La Habana, donde dijo no recordar muchos detalles del accidente porque estaba dormido en el momento del choque.
Por su parte, el español confirmó la versión oficial del accidente en una declaración grabada durante su detención y difundida por las autoridades cubanas.
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