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viernes, 3 de junio de 2011

El disidente Guillermo Fariñas inicia una huelga de hambre por la muerte de Wilfredo Soto García


La Habana, Cuba. (RTVE)- El disidente cubano Guillermo Fariñas ha iniciado una huelga de hambre y sed para exigir una investigación independiente por la muerte del opositor Juan Wilfredo Soto García, según recogen varios medios digitales cubanos.

"El Gobierno tiene que llevar a juicio a los autores directos del crimen de Juan Wilfredo y hacer un pronunciamiento público para el cese de las palizas a los opositores pacíficos", ha afirmado Fariñas al Diario de Cuba.

El opositor cubano exige a la Fiscalía que cite a los "30 testigos" del asesinato de Soto García.

El disidente Juan Wilfredo Soto, de 46 años, murió el pasado 8 de mayo en un hospital de Santa Clara y según la oposición interna cubana su muerte fue consecuencia de una paliza que dos días antes le propinó la policía.

En una nota divulgada al día siguiente de su muerte, el Gobierno de la isla negó agresión policial alguna contra Soto García y mantenía que éste tenía problemas de salud y que falleció por un fallo multiorgánico originado por una pancreatitis aguda.

El Gobierno de Raúl Castro denunció una "nueva campaña difamatoria" orquestada contra la revolución cubana, mientras la Unión Europea anunció que pediría información sobre las circunstancias de la muerte del opositor.

24ª huelga de hambre

Fariñas, de 48 años, se encuentra reunido, en su casa de Santa Clara, con la junta directiva del Frente Antitolatitario Unido para nombrar un portavoz y evaluar la posibilidad de realizar la huelga en otro lugar, ya que su familia está "desesperada".

Se trata de la vigésimo cuarta huelga de hambre del también periodista en 15 años. La última la inició en 2010 por la muerte de otro disidente, Orlando Zapata, y la detuvo tras el anuncio de la liberación de 52 presos políticos en Cuba.

Fariñas pasó la mayor parte de esa huelga hospitalizado en una unidad de terapia intensiva en un hospital de Santa Clara donde recibía medicación y alimentación por vía parenteral.

El disidente ha manifestado que aún le quedan secuelas de aquella huelga y responsabiliza al Gobierno cubano de "cualquier desenlace fatal" que pueda tener la decisión de acometer esta nueva protesta.

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