Ciudad de La Habana, Cuba. (PD)- Ismari González Castañeda, madre de Yoandry Rafael Guillot González, un joven de 20 años que lleva tres en la prisión 1580, cumpliendo una condena de 12 años de privación de libertad, denuncia que a su hijo, que está enfermo, le niegan la licencia extra penal por enfermedad, que recomiendan los médicos del penal.
Refiere Ismari González que su hijo durante una riña tumultuaria que hubo en la prisión 1580 el 29 de octubre de 2010, fue golpeado salvajemente por 8 reclusos. Con una cabilla le partieron la cabeza y fue sometido a una operación de urgencia, de seis horas de duración, en el hospital “Calixto García”. Estuvo nueve días en terapia intensiva, después permaneció en terapia intermedia, hasta que lo trasladaron al hospital de reclusos del Combinado del Este. No podía caminar ni hablar y tenía el lado derecho inmovilizado.
Según refiere la madre, en el hospital de reclusos lo tuvieron por dos meses. Los médicos Sosa y Mariano dijeron que no podía estar más tiempo en el hospital, y fue trasladado para el puesto médico del edificio uno, por tres meses. El 15 de junio fue re ubicado en el puesto médico del edificio dos, al ver Yoandry el cambio brusco que tuvo (había 36 reclusos, mientras que en el anterior eran cuatro) se alteró mucho. Entonces fue esposado y golpeado por 6 oficiales de orden interior, que además le echaron spray en los ojos.
EL joven ha quedado con muchos problemas en el habla y sufre convulsiones hasta cuatro veces al día. Ella ha tenido que llevarle los medicamentos indispensables (Pirazepán, Fenobarbital y Convulsin) debido a que no los hay en el hospital de reclusos.
En las historias clínicas hechas por los médicos del HNR y el hospital “Calixto García”, se advierte que Guillot no está apto para convivir entre reclusos.
La madre ha ido siete veces a las oficinas del MININT, de 15 y K, y en la de la Plaza de la Revolución. Todos los jueves se presenta en la oficina de atención a la ciudadanía del Combinado del Este, donde se ha entrevistado con el oficial Emilio, el médico jefe del HNR, la jefa de enfermería, y el jefe de la prisión. Todos le han prometido que le van a dar la licencia extra penal a su hijo.
“Desde hace ocho meses me están diciendo lo mismo, pero si no hacen algo pronto, mi hijo se me va a morir en la prisión”, advierte González.
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